«Hágala usted mismo»: cómo son las casas que se venden con un kit para armar en 2 días

Mientras que la construcción de una unidad de vivienda funcional puede parecer una tarea imposible, Amazon ha intervenido para poner a disposición de las masas una tendencia milenaria: pequeñas casas fáciles de comprar y fáciles de construir. La plataforma ofrece más de dos docenas de opciones, que incluyen desde cabañas de 10,5 metros cuadrados por USD 5.350 hasta casas-loft por USD 20.000.

Todos los materiales necesarios para la construcción de la pequeña casa aparentemente vienen en el paquete: tablas de madera, tejas de techo, paneles de vidrio, clavos y tornillos, y cerraduras para las puertas.

«A nivel estético, se trata de una versión simplificada de las cabañas de troncos típicas de la zona de New England, al norte de Nueva York. Son estructuras prefabricadas que muchas compañías venden en todos los posibles tamaños y configuraciones, incluyendo los amish que las eligen como sus viviendas desde hace muchas décadas», explicó en diálogo con Infobae el arquitecto argentino radicado en Nueva York Pablo Jendretski.

Las pequeñas casas son «lo suficientemente grandes como para funcionar como una casa de verano, un departamento, una oficina o incluso un edificio de venta independiente», según explican en su descripción desde la empresa que vende el kit, Allwood Outlet, una minorista de producción de madera.

La compañía sostiene que solo se necesitan «herramientas básicas» para su construcción. Para el comprador que tenga experiencia mínima, el paquete viene acompañado de instrucciones «fáciles de seguir». Sin embargo, es posible que se necesite experiencia externa. El kit de casa pequeña viene con tablas del piso, pero no con materiales para construir una base que garantice que la casa sea segura y estable.

«Vale mencionar que al kit que venden se le deben en agregar una plataforma de fundación, agua, electricidad, gas y cloaca, entre otras cuestiones fundamentales, antes de poder considerarlo una vivienda sea lo pequeña que sea», agregó Jendretski.

Para compensar la falta de electricidad, cada habitación tiene al menos una ventana para aportar una iluminación natural. Para convertir las cabañas en residencias, Allwood sugiere agregar conexiones de servicios públicos para electricidad e Internet, y aislamiento para temperaturas más frías.

También se recomienda no usar este modelo como una casa pequeña, sino como una «oficina en casa, casa en el lago, casa de huéspedes, estudio de yoga, quiosco de venta minorista o simplemente un retiro en su patio trasero».