Las carreras del siglo 21, aún lejos de ser masivas
Los adolescentes de 15 años de gran parte del mundo se visualizan ejerciendo carreras tradicionales cuando cumplan 30 años. Se ven como médicos, maestros, abogados o psicólogos.
Los datos surgen del informe Dream Jobs? Teenagers’ career aspirations and the future of work, realizado durante las pasadas pruebas de evaluación internacional Pisa, que organiza cada tres años la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde), y que La Voz publicó semanas atrás.
El informe, que analiza la evolución de los intereses en los últimos 20 años, revela que los anhelos profesionales variaron muy poco desde el cambio de milenio. Es paradójico, pero pese a vivir en la era de las redes sociales, la impresión 3D y la inteligencia artificial los chicos siguen imaginando que sus ocupaciones serán similares a las de los hombres y las mujeres de los siglos 19 y 20.
¿Qué pasa en Córdoba? ¿Cómo ha sido el comportamiento de los ingresantes a la Universidad Nacional de Córdoba entre los años 2000 y 2018? ¿Eligen carreras clásicas o las del futuro?
Según la información publicada en los Anuarios de la UNC, los cordobeses nos parecemos bastante al resto de los ciudadanos del mundo. Las siete carreras de grado más elegidas por los ingresantes, entre las 88 disponibles, son: Psicología, Ciencias Económicas, Abogacía, Enfermería, Kinesiología, Medicina y Arquitectura.
Las “carreras tradicionales” no han detenido su crecimiento en los últimos 18 años, con excepciones vinculadas al cambio de planes de estudio (como en el caso de Abogacía). Siguen siendo las más elegidas y cada año seducen a nuevos aspirantes.
Las “carreras innovadoras” o “carreras del futuro” –entendiendo por esto a aquellas que son requeridas por el mercado laboral local e internacional, vinculadas con la tecnología– han aumentado de manera notable su matrícula en los últimos años.
Ingeniería en Computación o Ingeniería Biomédica, incrementaron su matrícula 250,5 por ciento y 202 por ciento, respectivamente. En el primer caso en el período 2001-2018 y, en el segundo, desde su creación en 2004 y hasta 2018. Sin embargo, la cantidad de ingresantes sigue siendo muy baja en relación a las tradicionales. El número de nuevos alumnos de Ingeniería en Computación, por ejemplo, es 10 veces menor que el de los alumnos que escogen Psicología (año 2018).
Entre las ofertas educativas con mayor antigüedad y trayectoria, Psicología es la que más ha crecido en los últimos 18 años: 103,5 por ciento entre los 2000 y 2018.
Si se observa la cantidad de ingresantes en conjunto por Facultad, las más elegidas son las carreras de Ciencias Médicas (Medicina, Licenciatura en Enfermería, Licenciatura en Kinesiología y Fisioterapia, Licenciatura en Nutrición y Licenciatura en Producción de Bioimágenes), que concentran el 24 por ciento de la matrícula.
Más demanda
Para el análisis de las preferencias de los ingresantes a la UNC, escogimos cinco carreras de grado consideradas tradicionales (Abogacía, Ciencias Económicas, Medicina, Psicología y Arquitectura) y cinco, innovadoras, “del futuro” o de gran demanda en el mercado laboral del siglo 21 (Ingeniería en Computación, Ingeniería Biomédica, Ingeniería Ambiental, Licenciatura en Ciencias de la Computación y Producción de Bioimágenes).
Los datos revelan un crecimiento de la demanda de ingreso en las carreras innovadoras, pero con un número de alumnos muchísimo menor a las clásicas.
Roberto Terzariol, secretario general de la UNC, sostiene que es una tendencia de los últimos tiempos y que para el ciclo lectivo 2020 se observa un aumento en el número de inscriptos a todas las carreras. Aunque, informa, las innovadoras crecieron aún más.
“Si comparamos la gente que se anotó el año pasado y la que lo hizo este año, hay un incremento en todas las carreras en la Universidad. Pero en donde se nota un aumento mayor es en aquellas carreras que podríamos considerar no tradicionales: Ingeniería Ambiental, Ingeniería Biomédica, Ingeniería de Computación, Licenciatura en Computación y la diplomatura en Big Data, de Famaf. En esas carreras se ha notado un interés muy superior a las más tradicionales, las cuales no han disminuido, pero aumentaron menos”, subraya Terzariol.
Las clásicas
En 18 años, la cifra de ingresantes a Psicología creció 103,5 por ciento. En 2000 contaba con 1.383 nuevos alumnos, mientras que en 2018 eran 2.815. Los ingresantes en 2018 representan el 8,76 por ciento del total de nuevos alumnos en las carreras de grado y de pregrado de la UNC, que fueron 31.245 personas.
Esto convierte a Psicología en la carrera más escogida. El número de ingresantes trepó de manera notoria en 2011 y se mantuvo en aumento año tras año, desde entonces.
Patricia Altamirano, decana de la Facultad de Psicología, plantea que a pesar de no contar con evidencia empírica que explique las motivaciones de los alumnos para escoger esta carrera, es probable que sea elegida porque es un espacio que obliga a una interpelación personal y que atrae a “personas que se preguntan por sí mismas, a las que tienen una orientación de cuidado de los otros o una particular sensibilidad sobre el dolor”.
Altamirano indica que el crecimiento en la matrícula a partir de 2010 también podría estar vinculado a la aprobación de la Ley de Salud Mental, que puso en discusión las prácticas en el ámbito de la salud mental y dio un marco para las políticas públicas.
En Abogacía, la cantidad de ingresantes cayó el 14 por ciento entre 2001 y 2018 (2.036 ingresantes versus 1.784).
El vicerrector Ramón Pedro Yanzi Ferreira explica que, durante ese período, la carrera de Derecho comenzó a ofrecerse en otras universidades como la Blas Pascal y la Siglo 21. Además ya se dictaba en la Universidad Católica y, luego, en las universidades nacionales de Villa María, de Río Cuarto y de San Francisco.
“La cantidad de inscriptos en Derecho ha sido históricamente de más de 4.200 estudiantes. Pero siempre hay 15 por ciento que se inscribe, pero no aparece por la Facultad, porque se anota también en otras carreras. El ingreso es irrestricto, pero deben aprobar la Introducción a los Estudios de la Carrera de Abogacía (Ieca)”, indica Yanci Ferreira, también exdecano de Derecho.
En general, sostiene el vicerrector, quienes aprueban el cursillo e ingresan representan entre el 52 por ciento y el 57 por ciento de los inscriptos. Los ingresantes a Derecho conforman el 5,55 por ciento de la matrícula total de la Universidad. Es la tercera carrera con más ingresantes de la UNC.
El número de ingresantes al ciclo básico de Ciencias Económicas aumentó 0,7 por ciento entre 2009 y 2018 (2.230 ingresantes versus 2.247). Quienes eligen esta carrera representan el 6,99 por ciento del total de la matrícula. Es la segunda más elegida.
Entre 2000 y 2018, la cifra de nuevos alumnos en Arquitectura creció 19,2 por ciento (820 alumnos en 2000 y 978, en 2018). Los ingresantes representan el 4,01 por ciento de la matricula da la UNC. Es la séptima carrera en las preferencias de los alumnos.
La situación de Medicina es singular. En 2000 ingresaron 1.696 estudiantes, pero al año siguiente y hasta 2015 inclusive rigió un “cupo” que permitía el ingreso de alrededor de 500 personas por año. En 2016, tras las modificaciones a la Ley de Educación Superior, ingresaron 1.681 alumnos; en 2017, 1.409, y en 2018, último dato publicado, 1.526.
Demanda. En tecnología, el mercado pide más egresados. (Javier Ferreyra)
Las del “futuro”
Las carreras que podrían considerarse innovadoras crecieron de manera considerable en los últimos años. Sin embargo, aún tienen pocos estudiantes y su alumnado representa una pequeña parte de la matrícula total de la UNC.
Terzariol informa que las carreras relacionadas con Ingeniería Ambiental o Big Data han experimentado “un crecimiento exponencial” en el interés de los preinscriptos de este año.
Según la información estadística, Ingeniería en Computación creció el 250,5 por ciento entre 2001 y 2018 (85 ingresantes, en 2001 y 298, en 2018). El número representa el 0,93 por ciento de la matrícula. Es la carrera número 27 en las preferencias de los nuevos estudiantes.
La carrera de Ingeniería Biomédica, creada en 2004, creció 202 por ciento en 14 años (99 ingresantes, en 2004 y 299, en 2018). Se ubica en el puesto 26 de las preferencias y representa el 0,93 por ciento de la matrícula total de la UNC.
Terzariol opina que los estudiantes están percibiendo cuáles son los nichos del mercado. “Se dan cuenta de que las carreras tradicionales no son la gran panacea para el futuro y ven que existen otras carreras que pueden satisfacer la demanda laboral del día de mañana”, plantea.
Ingeniería Ambiental es una carrera nueva, cuyo número de ingresantes se incrementó 175,4 por ciento en cinco años (en 2014 ingresaron 153 personas y en 2018, 246). El número representa el 0,77 por ciento de la matrícula total y aparece en el puesto 32 de las preferencias.
La carrera de Producción de Bioimágenes incrementó el número de nuevos alumnos el 195,4 por ciento. En 2000 eran 244 y en 2018, 721. Se ubica entre en el número 12 en las preferencias y representa el 2,24 por ciento de la matrícula total de la UNC.
La cifra de nuevos alumnos en la Licenciatura en Ciencias de la Computación aumentó 130 por ciento en 18 años. En 2000 170 estudiantes iniciaban sus estudios y en 2018, 391. Es la número 17 en las preferencias y representa el 1,22 por ciento de la matrícula.
Terzariol remarca que cada vez más egresados de estas carreras realizan tareas vinculadas al software de un país hacia otro. “Exportan conocimiento y tecnología sin necesidad de grandes equipamientos tecnológicos. Trabajan acá y venden servicios a cualquier parte del mundo”, remarca.
Nicolás Wolovick, profesor asociado de la Licenciatura de Computación de Famaf, piensa que es difícil hacer un diagnóstico sobre las causas de la escasez de estudiantes en carreras muy buscadas en el mercado de trabajo nacional e internacional.
“No sé muy bien por qué la gente no elige las carreras más ‘modernas’, en el sentido tradicional del término, con mayores oportunidades de salida laboral. Quizá tiene que ver con que en la secundaria hay falencias en esas materias y los predispone mal. La deserción en primer año (de la Licenciatura en Computación) es altísima porque los chicos nunca tuvieron computación en el colegio y no saben lo que es. Además, hay una idea de que es una carrera difícil, lo cual es falso”, plantea.
“Además, creo que todavía es muy fuerte la idea de ‘mi hijo, el doctor’. Se considera que el posible ascenso social se da con las carreras tradicionales y las carreras más nuevas o del futuro todavía no entran en esta configuración”, agrega.
Computación creció 130% en 18 años
Pero representa apenas el 1,22% de la matrícula.
La cifra de nuevos alumnos en la Licenciatura en Ciencias de la Computación aumentó 130% en 18 años. En 2000 170 estudiantes iniciaban sus estudios y en 2018, 391. Es la número 17 en las preferencias y representa el 1,22% de la matricula. Tiene alta deserción.
El 51,6% de ingresantes, en 13 carreras