En pandemia bajaron un 20 por ciento las coberturas de vacunación en Córdoba
Las coberturas de vacunación vienen descendiendo a nivel nacional y provincial, como consecuencia de varios factores relacionados con esta inédita crisis sanitaria mundial. En Córdoba, el descenso rondó este año el 20 por ciento, según datos parciales del Ministerio de Salud provincial.
“Notamos un descenso variado en la mayoría de las vacunas del calendario oficial, en especial aquellas que se colocan en el ingreso escolar y a los 11 años. A nivel provincial, la baja ronda el 20 por ciento, comparando con el mismo período del año anterior”, explicó Sandra Belfiore, responsable del Programa de Inmunizaciones de la Provincia.
La funcionaria aclaró que estos son datos parciales, con un corte a septiembre. “A fin de año, cuando tengamos la información completa, podremos medir realmente el impacto que tuvo la pandemia en las coberturas”, indicó.
La Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) ya había advertido sobre los peligros que implican estos descensos. Durante los meses de cuarentena estricta, sólo estaban permitidas las consultas médicas de urgencia. Y luego persistieron limitaciones a la hora de circular y temor de la población a contagiarse de Covid-19. Muchas personas optaron por no concurrir a los centros de salud y también descendieron los controles de niños sanos y embarazadas.
“Hace meses que estamos trabajando para incentivar la vacunación. Y en este último trimestre del año, diagramamos actividades y estrategias para poder recuperar los esquemas atrasados”, explicó Belfiore.
Casa por casa
En este contexto, fueron diversas las estrategias para acercar las dosis a la población. La Municipalidad de Córdoba había implementado un sistema de visitas, casa por casa, durante la primera mitad del año, orientada principalmente a proteger con la antigripal a los mayores de 60 años. Y el jueves 3 de diciembre puso en marcha otra actividad, para recuperar las coberturas en niños de hasta 11 años, embarazadas y puérperas.
“Pusimos a disposición los centros de salud municipales, los hospitales, las direcciones de especialidades médicas y los centros de participación comunitaria. A los barrios que están más alejados los visitamos con dos móviles que tienen todas las vacunas del calendario. La idea es salir hacia la comunidad y poner a disposición las dosis para mejorar las coberturas”, explicó Ariel Aleksandroff, secretario de Salud de la Municipalidad de Córdoba.
Los centros de salud y CPC colocan dosis de 8 a 13. La campaña se extenderá hasta el sábado próximo.
Si bien todas las dosis del calendario cumplen su función de prevenir enfermedades y salvar vidas, hay algunas que son prioritarias. La SAP advirtió que enfermedades que habían logrado ser controladas, como el sarampión, la rubéola y poliomielitis, corren el riesgo de regresar si no se logran coberturas, por encima del 90 por ciento. También recordó que el año pasado se registró un brote de tos convulsa (o coqueluche), que afectó principalmente a niños y niñas menores de 6 meses.
“Las vacunas durante el embarazo tienen un rol fundamental. Porque la madre protege, a través de la placenta, a su bebé”, recordó Ana Ceballos, presidenta del Comité de Infectología de la SAP, filial Córdoba. Por su parte, Belfiore destacó la estrategia de trabajo en terreno desarrollada durante la pandemia, en la que agentes sanitarios visitaban los hogares y acercaban las vacunas a la población.
La funcionaria aclaró que la vacunación contra el Covid-19 puede llegar a concretarse por fuera de los vacunatorios o centros de salud que habitualmente colocan las dosis del calendario, para no resentir las coberturas. “Estamos pensando en circuitos diferenciados”, aclaró.
Por su parte, Aleksandroff explicó que la estrategia de acercar las vacunas a la población (y no esperar que la gente acuda al centro de salud) llegó para quedarse. Informó que, desde enero a octubre, se registró un descenso del 30 por ciento en la cantidad de dosis aplicadas por los efectores de salud municipales. Pero que con la campaña que cierra este sábado, se logró revertir esta tendencia.
Las vacunas más solicitadas fueron la antimeningococo, quíntuple y la que protege contra el neumococo. Le siguieron las que previenen la hepatitis b, HPV y la triple viral.
LA VOZ – NATALIA LAZARINI