El censo en Córdoba mostraría que somos muchos menos de lo que se calculaba – San Justo crecería 11%
Desde hace 11 años, los cordobeses no sabemos cuántos somos. El último censo nacional fue en 2010, y el que debía hacerse en 2020 (una ley establece su realización cada 10 años) se suspendió por la pandemia. Por la misma razón no se hará tampoco en 2021, y el Gobierno nacional acaba de anunciar su realización para el 18 de mayo de 2022.
Recién allí tendremos algunas certezas sobre la evolución poblacional de la provincia. Sin esas cifras, lo que queda a mano son cálculos y aproximaciones.
¿Qué datos depararía el censo si se hiciera hoy?, ¿qué cambios y sorpresas podríamos esperar?
Los demógrafos, al igual que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), arriman estimaciones sobre la base de proyecciones. Así, por ejemplo, se calculó que la provincia de Córdoba, que en 2010 contó 3.373.025 habitantes, tendría en 2021 unos 3.798.200, con un crecimiento del 12% en 11 años.
Eso, porque se plantea como eje básico la continuidad de la tendencia de la década anterior. Entre los censos de 2001 y de 2010, la población había aumentado un 8%.
La primera sorpresa que aportaría el nuevo relevamiento es que, en realidad, seríamos menos de lo que se había proyectado. Para eso incidirán dos factores: la tasa de nacimientos ha bajado desde 2016 y la de mortalidad (por efecto del coronavirus) ha crecido en 2020 y en 2021.
Lo explica mejor el demógrafo cordobés Leandro González: “Es esperable que la población crezca menos que la década anterior. Primero, porque la cantidad de hijos por mujer bajó respecto de hace 10 años. En realidad, hasta 2015 se mantuvieron estables los nacimientos, pero desde entonces descendieron. A la vez, en 2020 y en 2021 aumentó la mortalidad, por la pandemia. En 2020, fue un 10% más de lo esperado y en 2021 será aún más”.
Con menos nacimientos y más muertes, la tasa de crecimiento vegetativo de la población se desaceleró en los últimos años.
González, investigador del Conicet y docente de la UNC, lo pone en números: en 2010, la diferencia entre nacidos y fallecidos en Córdoba era de 31 mil personas por año. En 2019, antes de la pandemia, fue de 21 mil. En 2020, bajó a 17.500. Y es muy probable que en 2021 descienda aun algo más.
Así, la proyección del Indec no coincidiría en los números finales con la realidad. González estima que en 2021 esta provincia no tendría los 3,8 millones de aquella estimación, sino que calcula algo más de 3,5 millones.
En 2010, el 51% de la población cordobesa era femenina. En 2021 seguiría habiendo una levísima mayoría de mujeres, aunque la tendencia marcha hacia el emparejamiento.
DIFERENCIAS SEGÚN REGIONES
Si hoy hubiera censo, el crecimiento poblacional mostraría evidentes matices entre regiones y ciudades y varias sorpresas para los que no siguen de cerca este tema. Los padrones electorales, que se renuevan cada dos años, ofrecen algunas pistas, aunque no certezas definitivas.
La proyección del Indec marcaba, por ejemplo, que la Capital crecería en esta década la mitad del promedio provincial. La ciudad de Córdoba podría rozar los 1,4 millones de habitantes este año, contra los 1.317.000 contados hace 11 años.
Los nuevos números mostrarán, seguramente, la continuidad de la mudanza de capitalinos hacia localidades vecinas, fenómeno que se inició hace unos 20 años. La “grancordobización” goza de buena salud: los dos departamentos del interior que más crecerían en esta última década serán Santa María y Colón, ambos vecinos de la Capital.
Esta década ratificará una tendencia observada en la anterior: las zonas que más crecen en habitantes son el Gran Córdoba y los valles serranos.
Colón, por efecto del boom demográfico de la región de Sierras Chicas, quedará confirmado con el nuevo censo como el departamento más habitado del interior. Desplazará de ese sitio a Río Cuarto, que históricamente lo ocupó. Esa evidencia ya era anticipada por la proyección del Indec y la confirman los padrones electorales desde 2017.
Pero hay dudas hoy respecto de si Colón será, como en la década anterior, el departamento de mayor aumento poblacional. Porque al menos en los últimos cinco años fue Santa María –por efecto de la migración a Malagueño, a Alta Gracia y a comunas vecinas– el que muestra mayor crecimiento, visto por los padrones electorales.
El demógrafo González apunta que los departamentos que más crecen no sólo lo explican por la mayor migración que reciben, sino porque, en su mayor parte, esos migrantes son a la vez familias jóvenes que agregan una tasa de nacimientos superior al promedio.
Entre 2001 y 2010, los tres departamentos de mayor aumento poblacional fueron Colón, Calamuchita y Punilla. Entre 2010 y 2021 se sostendría esa tendencia, pero agregando a Santa María entre el primer y el segundo lugar.
EL NUEVO MAPA POBLACIONAL DE LA PROVINCIA
LAS SIERRAS, UN IMÁN
La migración hacia los valles serranos es otro fenómeno consolidado. Mediarían allí el aumento de las oportunidades laborales y económica con la expansión del turismo, en una franja, y la vocación por habitar sitios más atractivos en geografía, en otra.
Las proyecciones y padrones marcan con claridad que, sin contar el Gran Córdoba, son los departamentos turísticos los que más trepan en habitantes. Las proyecciones del Indec intuían que en esta década serían cabeza de esa lista Calamuchita, Punilla y San Alberto (área Mina Clavero-Nono). Debería agregarse ahora, como sorpresa porque no aparecía en aquellas proyecciones, San Javier (sur de Traslasierra).
Los padrones electorales de 2019, comparados con 2017, marcan que, de los 26 departamentos, los cinco que pegaron el mayor salto son del Gran Córdoba y de las Sierras, en este orden: Santa María, Colón, San Javier, Calamuchita y San Alberto. Visto así, el Valle de Traslasierra representa una novedad respecto de la década anterior.
También, sobre esos padrones 2017-2019, los departamentos de menor crecimiento de ciudadanos mayores de 18 años fueron Tulumba, Minas, Pocho, Sobremonte, Marcos Juárez, General Roca y Capital. Pero, según el Indec, para toda la década, serían los norteños Minas, Pocho, Sobremonte, Tulumba, más Capital, Tercero Arriba y Marcos Juárez.
La principal diferencia entre aquellas proyecciones del Indec y lo que muestran los padrones la dan los departamentos Santa María y San Javier: ambos crecerían por encima de lo calculado hace 10 años.
UNA PARADOJA
Un contraste paradojal ofrecen dos realidades sociales y geográficas bien diferentes, pero que –según las proyecciones y padrones– muestran un crecimiento en habitantes por debajo del promedio provincial.
Por un lado, aparecen varios departamentos del centro, del este y del sur provinciales, dominados por el desarrollo agropecuario, como Tercero Arriba, Marcos Juárez, San Justo, Roque Sáenz Peña, Río Cuarto y General Roca.
Por el otro, comparten esa situación los del noroeste provincial, históricamente más deshabitados: Minas, Pocho, Tulumba y Sobremonte.
Los primeros están entre los que menos índices de pobreza muestran. Los del noroeste, en cambio, son los más empobrecidos de la provincia.
¿UN CAMBIO POR VENIR?
Una duda que empiezan a analizar los demógrafos, aunque aún sin evidencias, es si, con la evolución del teletrabajo y de la educación a distancia, no se irían reduciendo desde ahora ciertas migraciones. La pandemia aceleró esos procesos, cuyos efectos podrían verse en algunos años.
Leandro González, por ejemplo, apunta en ese sentido que es esperable que las localidades del Gran Córdoba cada vez sean menos “ciudades dormitorio” porque sus residentes ya serían cada vez más estables y con menos tránsito diario a la Capital.
HABRÍA VARIAS NUEVAS CIUDADES EN EL INTERIOR
En Córdoba se reconoce como ciudad a las localidades de más de 10 mil habitantes. Tras el censo de 2010, cuando pasaron Mendiolaza y Brinkmann a esa “categoría”, son 48 las ciudades oficialmente reconocidas (de las 427 localidades del mapa provincial).
Varias quedaron al borde de serlo en 2010: eran las que sumaban entonces entre nueve mil y 10 mil habitantes. Todas ellas seguramente tendrían ese “título” si el censo se hiciera hoy. Salsipuedes, Santa María de Punilla, Villa de Soto, Huinca Renancó y Monte Cristo asoman en esa lista.
Luego, hay otra tanda que para llegar a los 10 mil debería registrar un crecimiento destacado en esta década. Villa del Totoral, Villa General Belgrano, Mina Clavero, Canals y Embalse integran ese lote. Si no llegan, quedarán cerca.
Colón es el único de los 26 departamentos con nueve ciudades (de más de 10 mil habitantes), y con el nuevo censo ya serán 10. Ningún otro tiene más de cuatro.
CUÁLES SON LAS LOCALIDADES QUE MÁS CRECEN
Según la comparación de padrones electorales de 2015 y de 2019, en esos dos años las localidades cordobesas que más crecieron en votantes fueron, en orden decreciente, Malagueño, Mendiolaza, Estación Juárez Celman, La Calera, Malvinas Argentinas y Monte Cristo. Un dato sobresale: todas pertenecen al anillo del Gran Córdoba.
La primera que asoma fuera del área metropolitana es Santa Rosa de Calamuchita, y luego están también varias de esa región, como Villa Ciudad Parque, Villa General Belgrano y Villa Yacanto. Otra para anotar será San Javier-Yacanto, en Traslasierra.
También se suman al lote, entre otras, Unquillo, Río Ceballos y Salsipuedes (las tres de Sierras Chicas), y el conjunto de Alta Gracia más sus comunas satélites, como Anisacate, Falda del Carmen y Los Aromos.
OTRO FENÓMENO LLAMATIVO
Un caso llamativo de crecimiento superior al promedio (pero fuera de las áreas metropolitana y serrana) sería Villa Nueva, que se explica por su vecindad con Villa María.
Algo similar ocurre con Holmberg y con Las Higueras, pueblos pegados a Río Cuarto.
En esos casos, esas localidades satélite crecen, mientras las grandes vecinas lo hacen en menor medida. Pero, en realidad, se trataría de crecimientos ligados a la expansión territorial de la urbe mayor. De alguna manera, podría empezar a hablarse del Gran Río Cuarto y del Gran Villa María como nuevos fenómenos.
QUÉ PASA CON LAS 15 CIUDADES MÁS GRANDES
El orden de las 15 ciudades más grandes de Córdoba puede que se altere con el censo de 2022.
Entre las seis mayores, no habría cambios. Según las proyecciones del Indec, hoy la Capital tendría 1.400.000 habitantes, Río Cuarto rondaría los 172 mil, Villa María podría contar 89 mil, Carlos Paz rozaría los 71 mill, San Francisco unos 66 mil y Alta Gracia superaría los 56 mil.
Las cifras surgen de proyectar en esta década un nivel de crecimiento similar al de la década anterior, como principal variable. De esas seis, Alta Gracia será la de mayor tasa de crecimiento.
En la década anterior, Carlos Paz había desplazado del cuatro lugar a San Francisco. En 2001, Alta Gracia había superado a Río Tercero en esa tabla.
Hoy, la séptima ciudad es Río Tercero, que según la misma proyección tendría ahora unos 49 mil vecinos, y la octava es Bell Ville, que rondaría los 36.500.
Novena aparecía en 2010 La Calera, pero, dado su marcado crecimiento, es un hecho que el nuevo censo la ubicará ya por arriba de Bell Ville. Algunos creen que también puede pasar en la lista a Río Tercero.
El Indec proyecta para hoy unos 44 mil habitantes para La Calera, pero en su municipio sostienen que son más de 50 mil.
Luego, entre los sitios de las 10 a 15 más pobladas, hoy quedarían (según aquellas proyecciones) Jesús María (con unos 38 mil), Cruz del Eje (33 mil), Villa Dolores (33 mil), Marcos Juárez (31 mil), Villa Allende (31 mil) y Arroyito (unos 27 mil pobladores).
En cada caso, habrá que esperar que el censo los cuente. Los demógrafos advierten que los cálculos que sólo cotejan los padrones electorales pueden arrimar indicios, pero también inducir a errores respecto de la población real.
LAS CUENTAS QUE SACAN LAS CIUDADES DE MAYOR CRECIMIENTO
Es una fija: cada ciudad cree tener más habitantes que los que un censo cuenta. Pero no hay modo más eficiente de contarlos que un censo, aun con sus márgenes de error.
Los intendentes, además, se entusiasman con que el reconocimiento oficial de más habitantes impacte en la cuota de coparticipación de fondos que reciben de la Provincia.
Algunas ciudades tienen más expectativas porque ven con mayor evidencia que otras, en lo cotidiano, un incremento de su población.
En Sierras Chicas, por ejemplo, Mendiolaza fue la localidad de mayor aumento poblacional en la década anterior. El censo 2010 la hizo ciudad y le contó 10.855 habitantes. Según su intendente, Daniel Salibi, hoy superaría los 20 mil, con base en una suma de cálculos municipales. “Cuando no se realizan los censos en tiempo y forma, perdemos mucho de la coparticipación que mereceríamos”, reclamó Salibi.
La Calera sumaba 32 mil pobladores según el censo de 2010. En su municipio creen que ahora rozan los 54 mil. Fernando Lucero, director de Gobierno municipal, se quejó de que “se recibe hoy una coparticipación de acuerdo con aquellos 32 mil”. Y señaló que las proyecciones dibujan a La Calera con unos 70 mil habitantes para 2030.
En la misma región, Salsipuedes es otro caso. En 2020 se contaron 9.842 habitantes y su intendente, Marcelo Bustos, sostuvo que hoy se acercan a los 20 mil. Precisó, por ejemplo, que hay entre más de 11 mil votantes mayores de 16 años en el padrón actual. “Las ciudades que más crecemos sufrimos por una coparticipación tan atrasada”, reclamó.
En Calamuchita, varios municipios plantean similares inquietudes. Santa Rosa, por caso, registró 12.395 residentes en 2010. Según calculan, ahora al menos duplican aquella cifra y hasta se animan a estirarla a los 26 mil vecinos. Cuentan allí el incremento en las matrículas escolares, la multiplicación en conexiones de servicios y el aumento en el volumen diario de recolección de residuos.
Su vecina Villa General Belgrano se muestra convencida de que ya es “ciudad”. El censo de 2010 contó 7.795 habitantes, pero el intendente Oscar Santarelli plantea que ahora podrían rozar los 13 mil, presumiendo un crecimiento cercano al tres por ciento anual. “El padrón actual es de 9.700 electores”, comparó.
En el departamento Santa María, en tanto, Malagueño asoma como candidata a ciudad cordobesa de mayor crecimiento de la última década. En 2010, el censo le reportó 11 mil pobladores; en 2020 calculan unos 25 mil, de la mano de la explosión de countries en esa localidad, vecina a la Capital. En su municipio dicen que, si se ocuparan todos los lotes de los nuevos barrios habilitados, tendrían cerca de 70 mil habitantes.
Alta Gracia, en la misma zona, también evidencia que su población escala. Hace 11 años, eran 48 mil los habitantes. Ahora, dan por seguro que no bajarían de los 56 mil. Y sostienen que, al ritmo actual, serían 70 mil en 2030.
Todos números que sólo un censo formal podrá confirmar o trastrocar.
(Con aportes de corresponsalías en Calamuchita y en Sierras Chicas)
INFORME LA VOZ DEL INTERIOR