A Córdoba le faltan de 3 a 5 meses para volver a la normalidad, estiman en Salud
La transición de la pandemia a la endemia Covid en Córdoba podría llevar de tres a cinco meses más, según estimó el ministro de Salud provincial, Diego Cardozo, en un tramo de una larga exposición en la Legislatura.
La etapa actual fue definida por el Ministerio de Salud como de “transición hacia la normalidad desde el punto de vista epidemiológico”.
Para Cardozo ya se superó la tercera ola de contagios, aunque advirtió que es esperable que en los próximos meses puedan “resurgir algunos brotes, aunque no al nivel de las anteriores olas”. Este es el fundamento de las últimas flexibilizaciones en las medidas sanitarias.
“En esta etapa vamos hacia integrar el virus al resto de los virus respiratorios, aunque seguiremos vigilando indicadores clave, que nos pueden dar luces verdes, amarillas y rojas en el semáforo epidemiológico”, completó la secretaria de Prevención y Promoción de la Salud, Gabriela Barbás, también en la presentación de este martes en la Legislatura.
Los indicadores definidos son la incidencia –casos nuevos en los últimos 15 días cada 100 mil habitantes–, razón –incidencia de los últimos 14 días en relación con los 14 días anteriores–, cobertura de vacunación, letalidad –fallecidos en relación con personas contagiadas– y porcentaje de ocupación de camas críticas.
Para cada uno de estos indicadores, se definieron “metas” de “normalidad” tras la tercera ola pandémica. De la comparación entre los últimos datos disponibles para cada indicador y el objetivo, se puede ver cuán lejos se está del paso de pandemia a endemia.
- Incidencia. La meta es no superar los 50 casos nuevos en una quincena cada 100 mil habitantes. En el informe epidemiológico presentado en la Legislatura y con corte a la semana 9 de 2022 (la pasada), la incidencia se calculó en 93 casos cada 100 mil habitantes. Viene en acelerado descenso: en las tres semanas anteriores habían sido de 415, de 214 y de 145 casos cada 100 mil habitantes.
- Razón. La meta está vinculada a la reducción de la incidencia. Tiene que tender a cero, para considerar que el escenario es estable. En la última medición dio 0,43 y riesgo bajo. Viene de estar en 0,35. En las semanas anteriores había dado 0,2 y 0,23.
- Cobertura de vacunación. La meta que fijó la Provincia es llegar al 95 por ciento de cobertura de segundas dosis y dosis de refuerzo. El objetivo está cerca de ser alcanzado en mayores de 18 años con esquemas primarios –dos dosis– completos: un 89,6 por ciento, al 6 de marzo. Si se considera también a la población de niños y adolescentes y el cálculo se hace para todos los mayores de 3 años, la cobertura con segunda dosis es del 85,1 por ciento. El remanente es aún mayor si la meta se formula con cobertura de tercera dosis: en mayores de 18 años es del 44,6 por ciento y si se considera a niños y adolescentes también, apenas del 34,6 por ciento. En mayores de 50 años –donde crece el riesgo sanitario–, la cobertura con refuerzo llegó al 55,9 por ciento.
- Letalidad. Se planteó como objetivo que sea inferior al uno por ciento de los casos diagnosticados. En 2022 es de 0,24 por ciento, contra 0,89 de 2021 y 1,96 por ciento de2020. En mayores de 60 años sigue estando por encima del objetivo: 1,64 por ciento este año.
- Ocupación de camas críticas. La meta es que esté por debajo del 10 por ciento. Ya se viene cumpliendo este objetivo desde hace varias semanas, en virtud de que el alto número de contagios de Ómicron no tuvo un impacto tan severo en casos moderados y severos. El último reporte marcó un 0,82 por ciento. Viene en descenso marcado: 6,48 por ciento a mediados de febrero, 3,51 por ciento una semana después y 1,42 por ciento en la semana 8 del año.
CÓMO SIGUE
La estrategia de monitoreo a partir de abril es enfocar el testeo en la vigilancia de grupos de riesgo y en las enfermedades respiratorias, en general.
Se harán diagnósticos a todos los niños de menos de 3 años, que no tienen vacunas disponibles; a los adultos con comorbilidades;, a las embarazadas y puérperas, y a los internados.
También se vigilará a los trabajadores esenciales: personal de salud, educación y seguridad, y las personas que viven y trabajan en comunidades cerradas (cárceles y geriátricos, entre otros lugares).
Todos los internados y los fallecidos por cuadros respiratorios irán a laboratorio, así como uno de cada 10 casos que se presenten en centros de atención primaria de la salud y hospitales.
Y se prevé también una estrategia de screening por sectores: testeos sistemáticos, por regiones o en la población general.
Para seguir avanzando en la cobertura de vacunación, se apelará a estrategias territoriales y en algunos municipios, a ir casa por casa, anticipó Barbás. “Los estándares que tenemos son muy buenos, pero para la prevención de Covid tienen que ser de excelencia y sabemos que en el último trecho de la población objetivo la estrategia tiene que ser diferente, focalizada. Creemos que la llegada de la vacuna de Pfizer para los niños de 5 a 11 años que tienen que iniciar esquemas aún va a contribuir en ese grupo etario, porque sabemos que muchos padres esperaban esa fórmula en lugar de la que teníamos disponible, que era Sinopharm”, puntualizó.
Quedan en stock de la Provincia unas 500 mil dosis. Además de las terceras dosis, se coloca una cuarta aplicación a los mayores de 50 años con esquema primario de Sinopharm e inmunocomprometidos. Pero es el único caso en el que se avanza en una cuarta dosis. “No hay lineamientos ni en el país ni en el mundo sobre la necesidad de avanzar en cuartas dosis. Lo que creemos es que en la próxima etapa no vamos a estar colocando un refuerzo cada cuatro meses, sino priorizando poblaciones y con intervalos de un año”, consideró la secretaria en el diálogo con los legisladores.