🔊Repelente casero con aguaribay: La bióloga Martino contó cómo hacerlo
En la lucha contra los mosquitos, son cada vez más quienes recurren alternativamente a los repelentes naturales, además del ahorro que significa para el bolsillo. Existen alternativas naturales y al alcance de la mano que podrÃa dar solución a aquellas personas que quieren mantener a los mosquitos bien alejados.
En diálogo con LA RADIO 102.9, la brinkmanense Dra. Julia Martino, quien trabaja en el Centro de Investigaciones en el INTA Córdoba, explicó que con un árbol tÃpico de esta zona podemos crear un repelente de insectos.
Se trara del aguaribay, el árbol nativo del norte y centro de Argentina, pero que puede encontrarse con facilidad en veredas, parques y casas en la mayorÃa de las provincias, como Córdoba.
“Desde los aborÃgenes que utilizaban como repelente agarrando sus hojas y frotándoselas en la pielâ€, señaló. Martino aconsejó no hervir las hojas para luego utilizar esa agua como repelente porque de esa forma se estarÃan volatilizando sus esencias.
Una de las caracterÃsticas más conocidas del aguaribay es que funciona como un repelente natural de mosquitos, razón por la cual su sombra era (y es) utilizada como lugar para descansar.
“Se puede agarrar un puñado de hojas, ponerlas en alcohol etÃlico y lo maceramos una semana aproximadamente. Ese lÃquido verde que va a quedar sirve para pulverizar como repelente. Para que no reseque la piel (teniendo en cuenta que es alcohol puro) se puede rebajar en 50% alcohol y 50% aguaâ€, dijo.
Lo importante es estar cubierto, “Su efectividad es menor a la de los repelentes comerciales, pero pueden sacarlo a uno de apurosâ€, dice.
Asimismo, señaló que hojas de cÃtricos también funcionan de la misma forma, incluso si le ponemos algunas cáscaras a la maceración. Además, con albahaca, romero, tomillo, combinando con citronella que potencia la fórmula.
PROPIEDADES DEL AGUARIBAY
El aguaribay fue considerado un árbol sagrado en la cultura inca y aún hoy en dÃa es apreciado por la enorme multiplicidad de usos que brinda, tanto con sus hojas, como su cortezas y sus frutos.
Esta especie puede utilizarse para realizar un brebaje para el sistema urinario, para curar llagas y eliminar la sarna: reconocidos personajes históricos como Garcilaso de la Vega, Félix de Azara y Manuel Belgrano destacaron algunos de estos usos en distintos libros o cartas.
La razón es que esta especie posee una serie de aceites esenciales y alcaloides, como el terpineol y el felandreno, que son repelentes naturales de mosquitos, incluido el Aedes Aegypti, vector del dengue.
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