Sequía. Campesinos y pequeños productores de Córdoba piden prohibir los aviones rompetormentas
Campesinos y pequeños ganaderos y agricultores de la provincia de Córdoba solicitaron al Gobierno provincial la urgente intervención para evitar la manipulación intencional del clima que –dicen– se viene realizando desde hace décadas en el norte y noroeste cordobés, lo que estaría afectando los ciclos hidrológicos naturales y provocando sequías extremas.
En una reunión en Casa de Gobierno el mes pasado, el grupo de campesinos y productores de Traslasierra y del noroeste de las Sierras Grandes pidió que se prohíba cualquier intervención intencional en las lluvias a través de los aviones rompetormentas o de otra tecnología.
En esa ocasión, presentaron un informe de la Universidad Nacional de San Juan (UNSJ), que recomienda al gobierno de esa provincia prohibir el uso de estas tecnologías y también entregaron información documentada sobre la manipulación climática en el país y en el mundo en los últimos 50 años.
Del encuentro participaron funcionarios del Ministerio de Bioagroindustria, del Ministerio de Agricultura y Ganadería, de las secretarías de Cambio Climático e Impacto Ambiental, del Ministerio de Ambiente y Economía Circular, técnicos del Observatorio Hidrometeorológico, legisladores, movimientos campesinos y la organización Cielos Limpios en América-Monitor Ambiental (Clama).
“Estamos luchando para tratar de combatir el uso de aviones rompetormentas. Nos están destruyendo el clima, nos están destruyendo la naturaleza”, dice, con énfasis, Marcelo Moyano, apicultor desde hace más de 30 años en Bajo de los Corrales en la Pampa de Pocho.
“Para muchos es un mito, más que nada para nuestras autoridades políticas. Muchos nos dicen que no puede ser que exista un avión que rompa las tormentas. Pero yo pongo por ejemplo a Mendoza, que tiene cinco aviones rompetormentas y están legislados por el Gobierno”, plantea Moyano.
“Nosotros los vemos; hay muchísimas fotos de cuando los aviones entran en el núcleo de la tormenta y a los 10 minutos no queda nada. Es una de las formas de destruirnos”, apunta el apicultor, que tiene unas 900 colmenas en su zona y en Chancaní. Indica, además, que los productores y campesinos de cinco provincias están pidiendo la restricción de estos aviones.
“Hace cuatro años que la sequía nos viene afectando muy mal. Este año ya nos pegó mal del todo. Estamos pidiendo una ley para que los aviones rompetormentas no vuelen más. Están matando a nuestros animales, secando todos los arroyos y ríos de todo el valle transerrano. Pedimos por favor a nuestras autoridades políticas que hagan algo, que dejen de tratar como ignorantes a la gente del campo. Por la sequía se ha perdido más de un 70 por ciento las cosechas en la Pampa de Pocho”, asegura Moyano.
El pedido de los productores provocó que el Gobierno de Córdoba pida asesoramiento de representantes de la Administración Nacional de Aviación Civil (Anac) y de la empresa estatal mendocina Aeronáutica de Mendoza SA que realiza este tipo de prácticas en la provincia cuyana y realizara un informe sobre la situación.
Finalmente, el Ejecutivo advirtió que en la provincia de Córdoba no está permitida esta práctica, ni existen autorizaciones otorgadas para llevar adelante cualquier tipo actividad que implique modificaciones y/o cambio artificial del clima y de las aguas atmosféricas, según lo establece el Código de Aguas Provincial.
Del mismo documento se desprende que teniendo en cuenta los costos económicos que implica realizar este tipo de actividades, sin financiamiento ni autorización estatal, no es posible ni rentable de llevar a cabo por cualquiera de los sectores productivos de Traslasierra.
Procedimientos de control
No obstante, a los fines de llevar tranquilidad a los productores, se implementarán procedimientos de control junto a Patrulla Rural, se investigará la existencia de posibles pistas de aterrizaje clandestinas y en caso de que hubiere, vuelos no identificados. También se tomarán muestreos de las aguas en las zonas denunciadas, para establecer si existen químicos provenientes de estas actividades antigranizo.
Estas medidas se concretarán mediante la acción coordinada entre el Ministerio de Ambiente, Bioagroindustria, la Dirección de Aeronáutica de la Provincia, el Observatorio Hidrometeorológico y la Administración Provincial de Recursos Hídricos (Aprhi).
En el caso de una denuncia de aviones sobrevolando las zonas y que generen dudas sobre la actividad que están realizando, la Patrulla Rural del sector solicitará geolocalización, horario, fotos y cualquier elemento que pueda servir como prueba.
A partir de esto, se comunicará de inmediato con la Dirección de Policía Aeronáutica para verificar el origen y destino de las aeronaves, mediante chequeos informáticos.
En caso de no poder constatar el registro de la aeronave, se enviará un avión provincial a la zona de Traslasierra para realizar el control visual, detener la actividad, y continuar con el operativo para aplicar las sanciones que establezca la ley.
Sequía y previsiones meteorológicas
Además de la posible afectación de los aviones rompetormentas, el territorio provincial Córdoba está en un proceso de anomalía climatológica.
La Mesa Nacional de Monitoreo de Sequías, integrada por la Red de Organismos Científico Técnicos para la Gestión del Riesgo de Desastres, elabora cada mes un informe detallado sobre las implicancias de la anomalía climatológica en cuanto a precipitaciones, humedad de suelos, índices de vegetación, hidrología e impacto.
En el caso de Córdoba, el último reporte de marzo de este año estableció un nivel de sequía leve en la región noroeste. Sin embargo, el territorio provincial estuvo afectado por la sequía en largos períodos de los años 2022 y 2023 en niveles moderados y severos.
Desde la mesa de monitoreo reconocen un déficit de precipitaciones que lleva más de un año. “Venimos de tres Niñas seguidas y vamos a una primavera niña”, expresó la meteoróloga Natalia Gattinoni.
Con la mira puesta en el futuro inmediato, el pronóstico climático trimestral (mayo, junio y julio) elaborado por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) indica una peculiaridad para nuestra provincia sobre las lluvias: no se ha podido determinar por consenso una categoría predominante por lo que se debe considerar la información estadística del trimestre y revisar los pronósticos a corto plazo y semanales.
En una reunión en la que participaron Luciana D’Acunto y María Eugenia Beget del Instituto de Clima y Agua del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta) coincidieron en que en un contexto de cambio climático serán vitales las medidas de adaptación.
La ingeniera agrónoma Silvana Walter, jefa de la agencia Inta de Villa Dolores ahondó en los efectos de la seca especialmente en los pequeños productores. “La disponibilidad de riego determinará la suerte de los cultivos. Durante el verano se perdieron lotes de producción por falta de agua y temperaturas sostenidas por encima de los 40 grados”. Y agregó: “Ojalá que en septiembre nos recuperemos. Algunos productores salen y vuelven del sistema, sobre todo son muy resilientes”.
LA VOZ