Alumnos de 4* grado el IPDFS dieron su «Promesa de Lealtad a la Bandera»
El acto solemne se desarrolló en el salón del establecimiento escolar, en horario del mediodía, al cierre de la actividad diaria. Contó con una nutrida participación de autoridades municipales, encabezadas por el intendente municipal. Lic. Mauricio Actis; mientras que por la familia institucional rojinegra estuvieron el presidente del club Centro Social, Ing. Sebastián Scalerandi, junto a directivos; la representante legal del instituto, Med. Vet. Anabel Ferrero; y el gerente de Mutual Centro, Cr. Mario de Paul. La concurrencia se completó con la asistencia de padres y familiares directos de los alumnos involucrados en la promesa.
La ceremonia, se inició con el ingreso de la bandera nacional portada por los abanderados y secundados por su directora, la Lic. Lucila Alias. En esta oportunidad, por ser su día específico, no fue escoltada por ninguna otra enseña.
A continuación, y con los acordes de la emblemática marcha Avenida de las Camelias, ingresó la formación de alumnos de 4º grado, “marcando el paso”, como una émula de un desfile militar. Portando bastones celestes, realizaron una muy aplaudida coreografía al ritmo de la referida canción patria y, a medida que se acababa la obra, fueron depositando sus bastones (con los que hicieron pases de bastoneros) en macetas altas, ubicadas adrede.
Como paso siguiente, se adelantó la formación de la bandera posicionándose frente al referido conjunto de educandos y la directora, Lic. Lucila Alias, pronunció la fórmula de rigor, tras lo cual le respondieron con el clásico “si prometo”, que se vio coronado por vivos aplausos del público presente.
Posteriormente se escucharon las palabras del intendente municipal, Lic. Mauricio Actis, quien felicitó a los promesantes por su intervención y, a la directora, por la prolijidad de la rutina desarrollada. Prosiguió con el mensaje de la directora que felicitó a los estudiantes de 4º grado por el comportamiento y a la docente del citado curso, quien fue la artífice de una agradable coreo, que demandó mucha práctica y disciplina.
Por último, los que se comprometieron con el lábaro nacional, recibieron diplomas y obsequios de parte de las autoridades citadas, tras lo cual y -ante el retiro de la bandera- concluyó el ritual anual de la escolaridad que contó con la aprobación generalizada de los presentes.
