Violencia de género. Femicidios: parejas y padres, las relaciones más peligrosas para las mujeres

Estos fueron los casos de Eugenia Villarruel (48), asesinada por Teodoro Villarruel en la localidad de La Carlota, en febrero de este año. También el del pequeño Mateo García (2) asesinado en marzo de 2024 en General Levalle y cuyo principal acusado por el crimen es su padre, Mario García (49). La hipótesis principal es que lo mató para hacerle daño a su madre.

El caso de Aralí Vivas también tiene como principal sospechoso de su crimen a su padrastro, quien es investigado por la Justicia por haber abusado y asesinado a la niña en noviembre de este año en la localidad de Brinkmann.

En otros dos casos se dieron vínculos distintos. El de Olga Bernardi, asesinada en Alta Gracia, en enero, y cuyo principal sospechoso es su hijo, Marcos Bottaro. También el de Catalina Gutiérrez, asesinada por un amigo de la Facultad de Arquitectura de la UNC, Néstor Aguilar Soto, quien intentó prender fuego el automóvil luego de matar a la joven.

En todos los casos el femicida fue una persona del entorno cercano a la víctima, lo que refuerza la idea de que el mayor peligro para las mujeres se encuentra en sus relaciones familiares y de amistad más cercanas.

En 2019, de los 19 femicidios registrados, 16 fueron cometidos por parejas o exparejas. En 2020, la proporción fue similar, con 17 de 23. En 2021, fueron 14 de 15 los femicidios protagonizados por parejas o exparejas; en 2022, 13 de 20; mientras que en 2023 fueron 12 de un total de 16.

En investigación

Este año, además de las 14 víctimas contabilizadas, hay dos casos que se mantienen en investigación judicial. Por un lado, está el asesinato de Yanina Trigo, la mujer de 36 años que fue quemada en su casa de Villa Nueva el 5 de agosto y cuya muerte es investigada como un homicidio.

Por otro lado, se investiga la muerte de Fabiana Pacheco (37) quien sufrió graves heridas tras sufrir un accidente el 1° de diciembre en la autopista Córdoba-Rosario.

La mujer falleció una semana después y sus amigas reclaman que investiguen a su pareja, Gastón Emanuel Páez, un agente policial. Una amiga de Fabiana presentó la denuncia ante la Justicia.

Otros datos

El lugar del ataque: La mayoría de los femicidios ocurrieron en el hogar de la víctima o en lugares que compartía con su agresor.

Ciudades. Solo tres de los 14 femicidios ocurrieron en Córdoba Capital. La mayoría, 9 de los 14 ocurrieron en localidades del interior provincial.

Edad promedio: La mayoría de las víctimas de este año tenían entre 20 y 50 años, aunque se registraron casos extremos de mujeres muy jóvenes y mayores.

Métodos de ataque: En su mayoría, las muertes fueron producto de disparos de armas de fuego fuego (7), luego armas blancas (3) y, en menor medida, asfixia (2) y golpes (2).

Comparación con años anteriores

Si bien la cifra de 14 femicidios de este año muestra un ligero descenso respecto a los 16 casos de 2023, el promedio anual de asesinatos de mujeres desde 2019 no ha bajado de los 12 casos, lo que revela la persistencia de la problemática. Además, las características de los crímenes reflejan pocos cambios en las dinámicas de violencia contra las mujeres de todas las edades.

Un aspecto relevante para destacar es que, aunque las órdenes de restricción contra los potenciales agresores continúan siendo una herramienta clave, en al menos tres de los casos de 2024 las víctimas habían solicitado medidas de protección que no fueron efectivas. Este dato pone el ojo en la necesidad de evaluar la eficacia de las medidas de protección.

El análisis de 2024 evidencia que, aunque las cifras no aumentaron ni disminuyeron significativamente, los patrones de violencia persisten, al igual que las fallas en las políticas de prevención y acompañamiento.

Especialistas en las temática coinciden en que el próximo año será clave para exigir la implementación de políticas públicas que garanticen la protección de las mujeres. Además, hacen un llamado a la sociedad para visibilizar y actuar frente a la violencia de género, entendiendo que el problema es cultural y estructural.

Un 2025 con desafíos en materia de violencia

El análisis de 2024 evidencia que, aunque las cifras totales no aumentaron ni disminuyeron significativamente, los patrones de violencia persisten, al igual que las fallas en las políticas de prevención y acompañamiento.

Las especialistas coincidieron en que el próximo año será clave para exigir la implementación de políticas públicas que garanticen la protección de las mujeres. Además, hicieron un llamado a la sociedad para visibilizar y actuar frente a la violencia de género, entendiendo que el problema es cultural y estructural.

Organizaciones piden reactivar políticas públicas

Para entender las implicancias de estas cifras y los desafíos que plantea 2025, La Voz consultó a tres referentes en género: Guadalupe Rivero, presidenta de Asociación ConVoz, Mariana Palmero, miembro del Colectivo Ni Una Menos Córdoba y Betiana Cabrera Fasolis, dirigente de Mujeres de la Matria Latinoamericana (Mumalá) Córdoba.

Mariana Palmero: “El hogar sigue siendo el lugar más peligroso”

Mariana Palmero subrayó que todos los femicidios de este año en Córdoba fueron perpetrados por personas cercanas a las víctimas: parejas, exparejas, familiares y amigos. “Esto evidencia la violencia estructural y patriarcal que enfrentamos. Los crímenes reflejan desigualdades de poder que persisten en nuestras relaciones más íntimas”, dijo.

También hizo hincapié en una desigualdad territorial preocupante: “El 88% de los femicidios ocurrieron en el interior provincial, donde los recursos y las políticas de prevención son más limitados”.

También se refirió a que en la mayoría de los casos no hubo denuncias previas: “Esto puede obedecer no necesariamente a que esa situación haya sido una situación única, sino que las víctimas no hayan podido denunciar”.

Palmero insistió en la importancia de las políticas públicas: “La reducción del alcance estatal limita las posibilidades de denunciar y acceder a recursos. El cierre de programas y líneas de atención deja a muchas mujeres sin el apoyo necesario”.

Guadalupe Rivero: “Un contexto más hostil para las mujeres”

Guadalupe Rivero, de Asociación ConVoz destacó que 2024 fue un año marcado por el desmantelamiento de políticas públicas clave, como la reducción de personal en la línea 144 y los recortes al programa Acompañar. “Esto deja a las mujeres con menos recursos para salir de situaciones de violencia, en un contexto donde la dependencia económica sigue siendo una traba central”, explicó.

Además se refirió al contexto hostil hacia la temática: “Hay creciente violencia que hay a nivel cultural y social. En relación a los discursos de odio, notamos un crecimiento del negacionismo en torno a la existencia de la violencia de género. Todo esto hace que el contexto sea mucho más complejo no solo para acompañar a las personas sino para las propias víctimas que tienen que denunciar”.

Rivero también alertó sobre el aumento de intentos de femicidio y la crueldad creciente en los crímenes: “La violencia no aparece de un día para otro, sino que escala en intensidad, es lo que llamamos “el círculo de la violencia”. “Es fundamental que como sociedad hablemos, escuchemos y acompañemos a las víctimas. Las parejas siguen siendo el vínculo más peligroso. Entonces si las políticas diseñadas para que las mujeres puedan slair de sus hogares fueron recortadas, quedan pocos recursos para ayudar a aquellas mujeres que tienen dependencia económica de sus agresores”, agregó.

Betiana Cabrera Fasolis: “Un problema cultural y sistémico”

Para Cabrera Fasolis, de Mumalá, el panorama de los femicidios no muestra una disminución significativa. Según los registros del Observatorio Nacional Mumalá, la provincia cerrará 2024 con 16 casos confirmados y algunos más en investigación.

La especialista también señaló que, aunque Córdoba suele registrar tasas de femicidios por debajo de la media nacional, la distribución desigual de recursos entre la capital y el interior es alarmante: “La mayoría de los crímenes ocurrieron fuera de la capital, donde las mujeres tienen menos acceso a políticas de prevención y acompañamiento”.

En cuanto al balance general, Cabrera Fasolis destacó la necesidad de mantener la lucha por los derechos conquistados: “El cierre de ministerios, programas y líneas de atención impacta directamente en la calidad de vida de las mujeres. Es urgente restablecer y fortalecer estas herramientas”.

14 mujeres menos en 2024

1. Olga Bernardi. 72 años. Asesinada en enero en Alta Gracia.

2. Eugenia Villarreal. 48 años. Asesinada en La Carlota en febrero.

3. Mateo García. 2 años. (Femicidio vinculado). Asesinado en marzo en General Levalle.

4. Ana María Loza. 59 años. Asesinada en mayo en Villa del Rosario.

5. Christelle Verónica Heredia. 34 años. Asesinada en julio en la ciudad de Córdoba.

6. Catalina Gutiérrez. 21 años. Asesinada en julio en la ciudad de Córdoba.

7. Claudia Estefanía Salguero. 30 años. Asesinada en septiembre en Cruz del Eje.

8. Romina Aiden. 40 años. Asesinada en octubre en Alta Gracia.

9. Aurora Wilda Brollo. 51 años. Asesinada en septiembre en Ischilín.

10. Aralí Vivas. 8 años. Asesinada en noviembre en Brickman.

11. Lucia Claribel Montana.24 años. Asesinada en noviembre en Laspiur.

12. Cecilia Andrea Ermácora. 40 años. Asesinada en noviembre en Villa María.

13. Jésica Domínguez. 35 años. Asesinada en diciembre en la ciudad de Córdoba.

14. Paulina Elizabeth Silva. 52 años. Asesinada en diciembre en La Para.