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s hospitales infantiles trabajan para recuperar a los pacientes con enfermedades crónicas que dejaron de asistir a las consultas, el año pasado. Según estimaciones de los distintos centros de salud, el descenso de controles en niños, niñas y adolescentes promedió el 40 por ciento.

“En 2020 tuvimos un paréntesis porque muchos chicos con enfermedades crónicas, como diabetes, celiaquía, asma o fibrosis quística dejaron de venir. Y eso impacta después en su estado de salud. Este año no nos podemos permitir perderlos y por eso salimos a buscarlos uno por uno, en una especie de trabajo artesanal”, explicó Verónica Petri, subdirectora del hospital de Niños de la ciudad de Córdoba.

Las coberturas de vacunación también descendieron el año pasado. La Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) realizó una advertencia a los familiares para que actualizaran los carnés de inmunizaciones y se pusieran al día con las vacunas del calendario. La organización propuso que se pongan en práctica campañas e iniciativas originales de captación, como la vacunación de conductores y acompañantes de vehículos, sin que se bajen de sus autos.

Juan Ledesma, director del hospital de Niños, explicó las causas de la baja generalizada en los controles de enfermedades crónicas, durante el año pasado: “Primero hubo temor y desconcierto por parte de la gente, que no se atrevían a salir de sus hogares por miedo a contagiarse. En nuestro caso, también influyó el cerramiento del Polo Sanitario. Sólo se accedía después de un control policial. Este año, la primera acción que realizamos fue levantar esa medida para mejorar la llegada al hospital”.

La SAP también solicitó poner atención a los controles de niño sano. La detección precoz de enfermedades durante el primer año es fundamental para prevenir patologías y mejorar la calidad de vida. También advirtió por la pérdida de coberturas de vacunación, en especial, niños y embarazadas. Y recordó que el brote de tos convulsa de 2019 afectó en su mayoría a menores de seis meses, cuyas mamás no se habían protegido con la vacuna.

En la misma línea, Eugenia Tirao, jefa de Infectología del hospital Intantil, apuntó: “El año pasado fue atípico. La internación fue escasa y recién en septiembre, cuando aumentó la circulación de las personas, muchos pacientes comenzaron a regresar. También cayó la cobertura de muchas vacunas, por eso estamos trabajando para estimular y recomponer las pérdidas del año pasado. Aunque no estamos en un nivel óptimo de inmunizaciones, sí hemos logrado mejorar muchas coberturas”.

Tanto el hospital de Niños como el Infantil trabajaron para captar a los pacientes que el año pasado dejaron de asistir a los controles. El primero, a través de los distintos programas (con la asistencia del Área de Servicio Social), se contactó con las familias que estaban registradas para pedir que los chicos volvieran a la consulta. El Infantil de Alta Córdoba también enfatizó en la búsqueda de niños, niñas y adolescentes con enfermedades crónicas, como patologías neuromusculares, asma y gastroenterológicas, por ejemplo.

“Entre finales del año pasado y comienzos de este 2021, prácticamente todos nuestros pacientes volvieron. Los tratamientos y controles clínicos en el hospital se recuperaron bastante”, explicó Tirao.

Además, en el hospital de Niños siguen vigente los dos circuitos diferenciados de atención. Por una parte, los pacientes con síntomas febriles y respiratorios. Por otra, el resto de las patologías, para minimizar el riesgo de infección. También se pusieron en marcha nuevos consultorios, como pediatría ambulatoria y se retomaron las prácticas de la Cátedra de Pediatría de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Córdoba. También se proyectan consultorios de neuro-urología, medicina del deporte y salud mental. Así como reforzar los quirófanos y las áreas de diagnóstico por imágenes.

En cuanto a las coberturas de vacunación, la SAP pidió prestar atención a las dosis del calendario destinadas a menores de un año y embarazadas.

Analía Garnero, jefa de Infectología del hospital de Niños, indicó que con el certificado único de salud escolar, que se solicita al comienzo de clases, se lograron actualizar las coberturas de muchas vacunas del calendario obligatorio.

Mayor circulación de virus respiratorios

Este año, hay mayor circulación de virus que provocan las Infecciones Respiratorias Agudas Bajas (Irab), en relación al 2020, cuando prácticamente no hubo casos. La bronquiolitis, principalmente causada por el virus sincicial respiratorio, afecta a los menores de 5 años.

Sin embargo, el escenario se encuentra lejos de la situación anterior a la pandemia. En 2019, se registró un brote de Irab y estas enfermedades figuraron dentro de las 10 principales causas de mortalidad infantil. Este año, provocan un tercio de las consultas en el hospital Infantil, cuando –antes de la aparición del Covid-19– representaban entre el 80 y el 90 por ciento de los motivos de asistencia para esta época invernal.

LA VOZ